domingo, 11 de octubre de 2009

Utopía

Fijo mi rumbo,
y voy hacia aquel anhelo, lo casi imposible.
Camino irresistible que conduce a la liberación,
y habita en el alma del amor.
Me cubro de incertidumbres,
avanzo y retrocedo sobre mis pasos.
Se vuelve espejismo y luego todo se desmorona.
Entonces construyo apurada,
olvidando los cimientos.
Cuando contemplo como todo se desarma,
en verdad, se dejan ver infinitos caminos,
y en ellos se refleja el verdadero desafío;
"caminar sin un aparente sentido".
Y yo que vivo por este fin,
no me aparto de aquel rumbo,
aunque el viento sople hacia otros destinos.