de abrir alguna puerta para entrar al juego.
Esperanza
de ser el fuego que en tu corazón avanza.
Ay, mis ganas
de irme a navegar tu piel hasta mañana.
Ya veré, se verá;
mientras no pare el río se intentará.
Ay, mi sueño
de entrarte y habitar tu rincón más pequeño.
Ay, tristeza
si vas borrándome y quitándome certeza.
Alegría
de ponerte a flotar hasta que venga el día.
Ay, deseo
que me muestra la forma de lo que no veo.
Ay, antojo
de sacar algo vivo de entre mis despojos.
Ay, mis ganas
tan ávidas de estrellas cuanto más lejanas.
Como vine me iré
nada me traje y nada me llevaré.
Ay, mi sueño
que pronto se hará humo, que no es más que un leño.
Ay, anhelo
de tirar de la cuerda que desata el vuelo.
Ay, tristeza
de que no vayan juntas verdad y belleza.
Alegría
de ver que de la nada sube una poesía.